Nuestra Historia y Misión

   Somos Paula y Sofi, amigas de toda la vida. Después de años en la ciudad -Paula en Marbella y Sofi en Zaragoza- decidimos volver al lugar donde siempre habíamos sido felices: nuestro pueblo de toda la vida, Nuño Gomez. Un lugar pequeñito, sin muchas oportunidades, donde aprendimos que si queríamos hacer algo, había que crearlo desde cero. Y así fue como empezó todo. 

   Sofi es diseñadora de interiores y Paula es apicultora (entre otras cosas), profesión que lleva en la sangre ya que su abuelo y su tío lo son también, y sus colmenas siguen en nuestro pueblo. Conectamos nuestras dos pasiones -la decoración y la apicultura- y decidimos crear algo que representara lo que amamos: lo artesanal, lo ecológico y el respeto por la naturaleza y los animales. 

   Desde el principio tuvimos claro que queríamos visibilizar la importancia de las abejas, apoyar la apicultura sostenible y demostrar que la cera de abeja no solo es un recurso noble y natural, sino también una forma de proteger y valorar a estos seres tan vitales para el planeta. 

   Nuestra aventura comenzó en el 2024 con una placa de cera de abeja que nos regalaron y algunos moldes. Fundimos la cera en casa con utensilios de cocina y fuimos probando... algunas salieron fatal, otras regular, ¡pero una nos salió preciosa! Y ese fue el primer paso. Luego llegaron errores como comprar cera de soja de bajo punto de fusión sin saber que no era apta para moldear... hasta que empezamos amezclarla con cera de abeja para conseguir firmeza. Fue un aprendizaje a base de ensayo, error y muchas risas. 

   Nuestra primera feria también la recordamos con mucho cariño. No sabíamos nada y nos enteramos el día de antes. Colocamos nuestra pérgola justo encima de las lonas de otro puesto sin saber que ahí estaba durmiendo un feriante. Se despertó de mal humor (normal), pero acabamos riéndonos juntos y ganándonos su cariño. Desde entonces somos conocidas como ''Las chicas de Javi'', y en cada feria nos busca para ponernos a su lado. Comemos juntos, nos reímos, compartimos el dia entero. Es parte de esa familia que se forma cuando emprendes de corazón. 

   Hoy en día estamos muy orgullosas de nuestros logros y de nuestro camino. Podemos ofrecer al mundo velas 100% de abeja de nuestras colmenas, velas de masaje y exfoliantes con cera de soja de bajo punto de fusión, y una colección de velas decorativas hechas con nuestra mezcla especial de cera de abeja y soja. Cada una es única, hecha a mano con mimo, en envases que muchas veces reciclamos de bares y restaurantes. 

   Porque en n mundo donde todo es rápido y desechable, creemos que volver a lo artesanal, a lo natural y a lo auténtico es más importante que nunca.

Y sí, nuestro sueño es grande: ver nuestras velas en todo el mundo, en hogares donde se valore lo hecho con amor, lo ecológico, y donde el zumbido de una abeja siga siendo sinónimo de vida.